Soluciones Climáticas Naturales en la Amazonía y el Cinturón Natural Negro/Afrodescendiente de las Américas
Los pueblos Afrodescendientes de las Américas son desproporcionadamente impactados por la superposición de crisis como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la degradación ecológica, la pandemia por COVID 19, la crisis de la salud pública, la desigualdad socioeconómica extrema, el racismo estructural y el aumento de la violencia contra líderes sociales. A pesar de que las comunidades del Cinturón Natural Negro/Afrodescendiente de las Américas (CiNAA) tienen un papel central en la respuesta integrada a crisis como estas, y a pesar de la gran riqueza de experiencias y buenas prácticas a nivel local y nacional, no se le ha dado suficiente preponderancia a las comunidades Afro-descendientes y al papel central que juegan en la transición socio-ecológica planetaria necesaria para superar las crisis climática y de biodiversidad. Este artículo, entre otros puntos, analiza la importancia de estas comunidades en la implementación del abanico de Soluciones Climáticas Naturales en la región y a nivel global en los territorios que se enmarca conceptualmente en este cinturón.
La humanidad enfrenta desafíos de gran magnitud e interconectados como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la degradación ecológica, la pandemia por COVID 19, la crisis de la salud pública, la desigualdad socioeconómica extrema, el racismo estructural y el aumento de la violencia contra líderes sociales,11. Global Witness. Defending Tomorrow: The climate crisis and threats against land and environmental defenders, 2020. entre otros. Los pueblos Afrodescendientes de las Américas son desproporcionadamente impactados por la superposición de estas crisis y al mismo tiempo están en el centro de su solución.
La región de América Latina y el Caribe tiene características privilegiadas para responder a estos desafíos a través de Soluciones Climáticas y Comunitarias Naturales22. El Informe Especial sobre el Cambio Climático y la Tierra, publicado por el Grupo Intergubernamental de Expertos Sobre Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) en agosto de 2019 afirmó el papel protagónico de países de América Latina en la identificación e implementación de Soluciones Basadas en la Naturaleza (SbN) que ayuden a combatir el cambio climático, preservar las reservas de biodiversidad y fortalecer la resiliencia de las comunidades. https://www.ipcc.ch/2019/08/08/land-is-a-critical-resource_srccl/. para la mitigación y adaptación al cambio climático en un marco de transformación y desarrollo sostenible, conservación ambiental, gestión de riesgo y resiliencia. Por un lado, el 42% de las emisiones de América Latina y el Caribe corresponden a la agricultura, silvicultura y otras formas de uso de la tierra (AFOLU por su sigla en inglés).33. AFOLU (Agriculture, Forestry and Other Land Uses) —Agricultura, Silvicultura y Otros Usos de la Tierra, ASOUT): Es un término de las directrices elaboradas en 2006 por el IPCC que describe una categoría de actividades que contribuyen a la emisión de gases invernadero antropogénicos. Por otro lado, la región cuenta con un gran patrimonio natural; en sólo el 16% de la superficie terrestre del planeta, contiene el 50% de la biodiversidad mundial, el 23% de la cobertura forestal y el 30% del agua. La intersección de estos fenómenos representa una de las mayores oportunidades para promover una transformación baja en carbono y el desarrollo sostenible de la región.
Sin embargo, la riqueza natural de América Latina y el Caribe está bajo graves presiones. Se estima que en la región existen 200 millones de hectáreas de tierra degradada y que la superficie forestal ha disminuido del 51% del territorio en 1990 al 46,4% en 2015. Esto tiene serias implicaciones sobre la conservación de biodiversidad y de ecosistemas estratégicos, los esfuerzos de mitigación del cambio climático, y la justicia ambiental y racial, pues gran parte de la riqueza natural de la región se encuentra en territorio de comunidades Afrodescendientes. Las comunidades étnicas, Indígenas y Afrodescendientes, cuentan con más de 400 millones de hectáreas que contienen alrededor del 40% de los bosques naturales de la región.44. Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). David Kaimowitz. Los Pueblos Indígenas y tribales y la gobernanza de los bosques. Una oportunidad para la acción climática en América Latina y el Caribe, 2021. http://www.fao.org/americas/publicaciones-audio-video/indigenas-y-gobernanza-de-bosques/es/. En el caso colombiano, este porcentaje llega al 50%.55. Lisneider Hinestroza. Declaración de áreas protegidas en territorios colectivos de comunidades negras de Colombia, 2008. Estos bosques contienen el 30% del carbono almacenado en los bosques de América Latina y el Caribe (34.000 MtC) y el 14% del carbono almacenado en los bosques tropicales a nivel mundial.
Actualmente, 135 millones no están legalmente cubiertos por derechos colectivos de propiedad o usufructo de las comunidades y los avances en la titulación son lentos e insuficientes. En los últimos 30 años sólo se han titulado 8 millones de hectáreas a Pueblos Afrodescendientes de 30 a 40 estimados como posibles entre Colombia, Brasil, Ecuador, Nicaragua y Honduras. Adicionalmente, los efectos del cambio climático representan una gran amenaza para la población Afrodescendiente de las Américas y están exacerbando las condiciones de vulnerabilidad, riesgo y exposición ante desastres naturales, y la perpetuación de pobreza extrema y condiciones de inequidad socio-ambiental.
Los eventos extremos del clima han impactado sustancialmente a estas comunidades en la última década. Esta situación se ilustra con los impactos de los huracanes Katrina, Harvey, Sandy, Irma, María y recientemente Laura que impactaron desproporcionadamente a la población Afrodescendiente del Caribe y de los Estados Unidos. Así mismo en América Latina y el Caribe, los recientes huracanes Iota y Eta impactaron a las comunidades marino–costeras del Caribe, incluyendo Colombia, Honduras y Nicaragua, con un efecto devastador para los pueblos afrodescendientes. A esto se suman los cambios incrementales de precipitación y temperatura que tendrán consecuencias negativas permanentes en los territorios de estas comunidades y cuyos efectos no están suficientemente estudiados desde un lente de justicia ambiental y racial.
Los impactos desproporcionados sobre estas comunidades no son una coincidencia.66. Comisión Económica para América Latina y el Caribe. Afrodescendientes y la matriz de desigualdad social en América Latina. Retos para la inclusión, 2020. https://repositorio.cepal.org/bitstream/handle/11362/46191/4/S2000226_es.pdf. Los primeros africanos esclavizados llegaron a América a finales del siglo XV como consecuencia de la infame trata de esclavos. De acuerdo al patrón de poblamiento asociado al cimarronaje y los palenques,77. Palenques y Cimarronaje: procesos de resistencia al sistema colonial esclavista en el Caribe Sabanero (Siglos XVI, XVII y XVIII). http://www.scielo.org.co/pdf/recs/n16/n16a04.pdf estas comunidades se ubicaron en zonas de alta oferta natural buscando aislarse del mundo colonial y utilizando los ecosistemas naturales como mecanismo de protección pero altamente conectados entre sí. Posteriormente, la estructura jerárquicamente racializada llevó a que estuvisen por fuera de la toma de decisiones en un marco de invisibilidad que se mantiene, dada la prevalencia del racismo estructural que sigue afectando a la región. Sin embargo, estas mismas condiciones de aislamiento llevaron a que estas comunidades desarrollaran modelos únicos de adaptación a sus entornos naturales que conllevan a la conservación del patrimonio natural.
Esta condición de exclusión histórica, se evidencia actualmente en la exposición desproporcionada al riesgo y las amenazas ambientales, y en el acceso desigual a la toma de decisiones relacionadas con la protección y conservación de los recursos naturales. Estos factores crearon condiciones de enorme injusticia ambiental y racial para la población Negra/Afrodescendiente en el Hemisferio Occidental. Aunque ha habido importantes avances en el reconocimiento del rol de las comunidades locales en la conservación de ecosistemas estratégicos,88. World Resources Institute. Katie Reytar, Peter Veit. Indigenous Peoples and Local Communities Are the World’s Secret Weapon in Curbing Climate Change, 2016. https://www.wri.org/blog/2016/11/indigenous-peoples-and-local-communities-are-worlds-secret-weapon-curbing-climate. es importante resaltar que sistemáticamente se sigue desconociendo el aporte de las comunidades Afrodescendientes. Por ejemplo, en las discusiones sobre la Amazonía, poco o nada se menciona las comunidades Quilombolas de Brasil, desconociendo que más o menos el 80% de la población de la Amazonia Brasileña es Afrodescendiente.99. https://agenciadenoticias.ibge.gov.br/agencia-noticias/2012-agencia-de-noticias/noticias/18282-populacao-chega-a-205-5-milhoes-com-menos-brancos-e-mais-pardos-e-pretos. Igualmente se desconoce la población Maroon en Surinam y Guyana, y los grupos Afrodescendientes colombianos que habitan este importante bioma. Un fenómeno similar se presenta cuando se abordan los asuntos relacionados con ecosistemas marinos y costeros, particularmente en el Caribe, las Bahamas y el sur de los Estados Unidos.
A pesar de que las comunidades de lo que hemos denominado como el Cinturón Natural Negro/Afrodescendiente de las Américas (CiNAA) tienen un papel central en la respuesta integrada a las crisis de cambio climático y de pérdida de biodiversidad, desigualdad y exclusión socioeconómica, tráfico de drogas, migración y violencia estructural, entre otros, y a pesar de la gran riqueza de experiencias y buenas prácticas a nivel local y nacional, no se le ha dado la suficiente preponderancia a las comunidades Afro-descendientes y al papel central que juegan en la transición socio-ecológica planetaria necesaria para superar las crisis climática y de biodiversidad. Es por esto que es preciso comenzar a documentar las condiciones geográficas, ecológicas y de importancia estratégica ambiental, así como los valores culturales, modelos de gobernanza y aportes históricos en la gestión ambiental. Así mismo, se debe resaltar la importancia que tienen las comunidades Afrodescendientes en la implementación del abanico de Soluciones Climáticas Naturales en la región y a nivel global en los territorios que se enmarca conceptualmente en este cinturón.
Este concepto geográfico está basado en características socio-ecológicas, lingüísticas y culturales a nivel hemisférico. Dada su escala, conlleva a que no haya solución climática efectiva sin el aporte del patrimonio natural de las comunidades Afrodescendientes de América Latina y el Caribe. Sin embargo, lo que sucede con estas comunidades es paradójico. Por un lado, poseen una enorme riqueza natural que presta invaluables servicios ambientales para la humanidad, y por otro, viven en medio de precarias condiciones y alto grado de necesidades básicas insatisfechas. Para superar estas condiciones, se requiere de nuevos paradigmas desde una visión del sur global que refleje los desafíos que tienen las comunidades que confrontan desafíos similares. Particularmente, teniendo en cuenta que el surgimiento y evolución del movimiento ambientalista y conservacionista1010. Dorceta E. Taylor. The Rise of the American Conservation Movement. Power, Privilege, and Environmental Protection, 2016. ha sido fundado bajo relaciones de poder que invisibilizaron y excluyeron a poblaciones Indígenas y Afrodescendientes a lo largo de América Latina, el Caribe y los Estados Unidos, el nuevo paradigma debería tener como ejes centrales la inclusión racial y social, la multiculturalidad, y la justicia pluriversal.1111. Arturo Escobar. Pluriversal Politics. The real and the possible, 2020.
En el camino a corregir estos desbalances históricos y sus consecuencias contemporáneas, es necesario identificar actores clave, conectarlos a nivel regional, generar intercambios, abrir espacios de escucha en centros de poder regional y global, y crear plataformas para amplificar las voces de líderes climáticos y ambientales afro-descendientes. Esto requiere del fortalecimiento de redes existentes, así como de la conformación de nuevas redes y nodos de intercambio de experiencias y cabildeo conjunto para amplificar la voz, la incidencia y la participación de estas comunidades en escenarios internacionales, regionales y locales, en donde se toman decisiones climáticas y ambientales que les afectan directamente. Adicionalmente, estas acciones deben ser potenciadas por desarrollos tecnológicos co-creados con las comunidades locales Afrodescendientes para la recolección y generación de datos y evidencia científica. En este sentido, es necesario implementar un enfoque diferencial y de justicia racial y ambiental en la generación de datos y en el análisis de impactos y contribuciones ambientales de estas comunidades desde una perspectiva subregional, regional y hemisférica,1212. Luis Gilberto Murillo & Caroline White-Nockleby. Climate, security, and racial justice: Biden’s opportunity to advance U.S. Policy in Latin America and the Caribbean, 2021. a la vez que se desarrollan tecnologías de punta que permitan fortalecer la efectividad de la gestión ambiental y la autonomía de estas comunidades en el manejo de sus territorios.
En este contexto, la justicia racial esta íntimamente ligada a la justicia ambiental. Son categorías indivisibles. Sin embargo, todavía se tienen interrogantes conceptuales, instrumentales y empíricos que invitan a darle mayor contenido teórico y práctico a la dimensión de justicia racial y equidad ambiental desde la perspectiva de las comunidades que viven el día a día de las grandes desigualdades socio/espaciales que caracterizan al hemisferio occidental. Este nexo crucial, pero poco estudiado, se exacerba con la falta de una agenda sistemática de investigación crítica alrededor de las relaciones entre bienestar de Comunidades Negras/Afrodescendientes en la escala hemisférica y la planificación urbana y ambiental, las acciones climáticas y de conservación de la naturaleza.
En la pasada COP 26 del Convenio Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático realizada en Glasgow, un destacado grupo de lideresas, lideres e innovadores comunitarios de la región, en colaboración con la Iniciativa de Soluciones Ambientales del Massachusetts Institute of Technology (MIT), lanzaron el Foro Inter-Afroamericano de Cambio Climático. Este Foro pretende promover respuestas efectivas a los vacíos de investigación participativa, implementación de acciones en terreno e incidencia de alto impacto, en un marco colaborativo desde una visión del Sur Global. Igualmente, este Foro busca empoderar a las comunidades Afrodescendientes a través de la creación y fortalecimiento de una red de líderes y lideresas afrodescendientes a nivel hemisférico, la sistematización de lecciones aprendidas y buenas prácticas, y el análisis y producción de información con un enfoque de justicia ambiental y racial.
Durante los próximos años, y con el apoyo de la Iniciativa de Soluciones Ambientales del MIT así como el de universidades y centros de investigación del Sur Global, el Foro estará enfocado en crear una agenda de investigación colaborativa para promover la co-creación de información, innovación comunitaria e incidencia de alto impacto que soporten la implementación de Soluciones Climáticas y Comunitarias Naturales como estrategias de transformación y construcción de equidad, paz y bienestar en el Cinturón Natural Afrodescendiente de las Américas (CiNAA) y la Amazonía.